viernes, 15 de noviembre de 2013

Declaración de la II Cumbre Continental de Mujeres Indígenas del Abya Yala





Nuestro sueño es la realización del buen vivir en las prácticas cotidianas de nuestros pueblos.
Que las mujeres y familias vivamos en armonía y en equilibrio, libres, en territorios seguros y con autonomía

Nos encontramos en la II Cumbre Continental de Mujeres del Abya Yala, los días 11 y 12 de noviembre, en el Territorio de Diálogo Convivencia y Paz del Resguardo de La María – Piendamó, Cauca Colombia, más de mil mujeres, provenientes de Ecuador, Bolivia, Perú, Guatemala, México, Chile, Venezuela, Panamá y Colombia y acompañadas de personas fraternas de otros pueblos, que luego de recorrer cientos y miles de kilómetros, nos encontramos para avanzar en el sueño de tejer experiencias y pensamientos, desde la diversidad que somos como mujeres, mayoras, jóvenes y niñas para la vida buena de todos nuestros pueblos.

Autoconvocadas, luego de 4 años recorridos desde la I Cumbre Continental de Mujeres Indígenas de Abya Yala realizada en mayo del 2009 en Puno – Perú, en la que nos encontramos para construir agendas internacionales de integración y solidaridad ante la ausencia de políticas favorables para las mujeres indígenas; nos reunimos hoy, precisamente para reafirmar los avances de estos años, como la participación de las mujeres en la resistencia frente a la expansión del extractivismo y saqueo de nuestros territorios, la lucha ha sido permanente como en Bagua y por la defensa del agua (Perú), la defensa del TIPNIS, Aguarague y Mallko Quta (Bolivia), el Yasuni en Ecuador, la Minga Social Indígena y Popular por la Vida, el Territorio, la Autonomía y la Soberanía en Colombia; la lucha y resistencia permanente de la mujeres Mapuche Lafkenche, el permanente levantamiento de las mujeres indígenas de Guatemala, la lucha contra la criminalización de las mujeres indígenas de todo el Abya Yala.

En esta segunda Cumbre nos propusimos analizar y evaluar los modelos de desarrollo que se están implementando en el Abya Yala para trazar estrategias de resistencia coordinada por la defensa de los derechos humanos y colectivos de las mujeres indígenas del continente; de igual manera la experiencia de violencia que vivimos ha sido objeto de reflexión para proponer mecanismos que nos fortalezcan como mujeres e indígenas y apunten a la transformación de las estructuras que perpetuan la discriminación, el racismo y las desigualdades.


La invasión que empezó hace más de quinientos años en Abya Yala aún no ha terminado. Hoy todos nuestros territorios están siendo expropiados para la explotación del agua, el oxígeno y los bosques; la imposición de economías extractivas y la realización de megaproyectos que aunque producen riqueza a los Estados, no significan ningún beneficio para los pueblos, por el contrario, dejan a su paso muerte, miseria, dolor, robo de nuestros recursos, de nuestra sabiduría y pérdida de la soberanía. El saqueo del oro, el petróleo ha generado un desequilibrio en la vida de los pueblos, afecta nuestra cotidianidad, la relación con la Madre Tierra, la espiritualidad y la armonía comunitaria.

El extractivismo, la militarización, el reclutamiento de jóvenes indigenas, los conflictos sociales y armados, las fronteras que nos imponen limitaciones para transitar libremente por los territorios han impactado de manera particular la vida de las mujeres. Desde cientos de años atrás hasta el presente somos víctimas de discriminación y falta de posibilidades para una vida digna, así como de las violencias más extremas: muertes, persecuciones, violaciones sexuales, violencia física y psicológica, por ser mujeres y por ser indígenas.

Ante esta realidad, tenemos el reto de posicionar nuestros conocimientos y saberes con dignidad, y desde el trabajo colectivo y la complementariedad entre hombres y mujeres. Si sólo tenemos una sola ala no podemos volar tan lejos, pero si tenemos dos alas, podemos volar más.


Nosotras las mujeres indígenas presentes en la II Cumbre Continental del Abya Yala:

AFIRMAMOS


• Que el ejercicio de los derechos de las mujeres indígenas empieza por empoderarnos de nuestras vidas y nuestros cuerpos y al rechazo de todas las formas de violencia que atentan contra la integridad física, espiritual y emocional.
• Que la realización del Buen Vivir se fundamenta en la reconstrucción de la complementariedad entre mujeres y hombres y con todos los seres que habitan los territorios para la revitalizar nuestros valores y principios como pueblos originarios.
• Que los Estados son los responsables de garantizar los derechos individuales y colectivos reconocidos a nivel nacional e internacional, respetando la Autonomía y la libre autodeterminación de los pueblos.

NOS PROPONEMOS

• Fortalecer nuestras agendas y acciones de mujeres que respondan a los cambios y dinámicas que vivimos en nuestras realidades y problemáticas con base en la participación colectiva.
• Mantener, replicar e intercambiar experiencias de formación y organización que nos aportan herramientas para avanzar en nuestros procesos colectivos como mujeres.
• Posicionar una visión amplia de la comunicación desde las mujeres indígenas, partiendo desde nuestra cosmovisión, espiritualidad y educación propia.
• Las mujeres acá presentes, nos comprometemos a continuar con los procesos de liberación puestos ya en marcha para la descolonización de la Madre Tierra que se manifiestan en lo local y nacional. Y hacemos un llamado para que en el nivel continental e internacional, unifiquemos esfuerzos para fortalecer la resistencia.
• Cuidar la Madre Tierra, hacer un uso respetuoso de suelo, mantener las semillas tradicionales y respetar los sitios sagrados.
• Continuar en el ejercicio de incidencia y exigibilidad de nuestros derechos individuales y colectivos en escenarios nacionales e internaciones acordados en los diferentes mecanismos de defensa de los DD.HH. de las Naciones Unidas y del Sistema Interamericano.
• Autoconvocarnos para la realización de un encuentro de mujeres indígenas migrantes.
• Conformar la Coordinadora Continental de Mujeres Indígenas del Abya Yala. Otorgándosele la responsabilidad a las Coordinadoras Regionales (CAOI, CICA, CIMA y COICA) para que en un plazo corto se reúnan las mismas, con la finalidad de articular agendas con la resolución de la presente Cumbre.
• Garantizar la participación efectiva de las mujeres indigenas en los procesos internacionales, como la Conferencia de Pueblos Indigenas (New York 2014), Cairo, Beijing, CEDAW, COP y la construcción de las ODS.

EXIGIMOS

Al Movimiento Indígena

• Tomar medidas efectivas para garantizar el acceso de las mujeres a la justicia propia.
• Para mantener el equilibrio en nuestras organizaciones, es necesario garantizar el ejercicio de alternancia entre hombres y mujeres, y nuestra participación en igualdad de condiciones.
• Fortalecer los programas de Educación propia, programas de mujeres, familia y jóvenes.
• Adoptar medidas comunitarias que regulen el acceso a cargos de autoridad a miembros que tengan antecedentes de violencia contra las mujeres, las niñas y los niños, y en casos de alcoholismo y drogadicción, cuando estas prácticas no hayan sido sancionadas ni armonizadas por la comunidad.
• Compromiso, unidad, solidaridad y coherencia con nuestra identidad y nuestro plan de vida. Que todo esfuerzo de resistencia apunte al fortalecimiento del gran proyecto de resistencia del Abya Yala y la vida plena para todas y todos.

A los Estados

• Garantizar la participación de las mujeres indígenas en la elaboración de Políticas Públicas.
• Crear las condiciones para que las mujeres accedan de manera efectiva a la justicia ordinaria, y establecer junto con las autoridades indígenas mecanismos de coordinación entre el Sistema Propio y el Sistema Ordinario.
• Adoptar las Políticas Públicas que garanticen el derecho a la educación y a la salud, enfatizando en la salud sexual y reproductiva, y la prevención y el tratamiento del VIH desde una perspectiva intercultural.
• Respetar los procesos de consulta previa, libre e informada según las normas y procedimientos propios de los pueblos, así como la no intervención del Estado en las decisiones comunitarias.
• Exigir reparación integral y justa ante deuda ecológica, ambiental, histórica y social con los pueblos indígenas.
• Reconocer y reparar los daños que las industrias extractivas causan en la vida de las mujeres indígenas y de sus familias.
• Que en todos los países se incluya los derechos laborales a las trabajadoras domésticas de todo el Continente, siendo muchas de ellas, mujeres indígenas, porque en el mundo ya se erradicó la servidumbre y la esclavitud.
• Detener los procesos de privatización de las semillas y el otorgamiento de patentes que atentan contra la vida de los seres humanos, como por ejemplo: el caso de la leche materna.

LA II CUMBRE CONTINENTAL DE MUJERES INDIGENAS SE SOLIDARIZA CON LAS EXIGENCIAS DE LOS PUEBLOS INDIGENAS:

• Al gobierno nacional de Colombia, que se abra la participación de los pueblos indígenas y de las mujeres indígenas en los procesos de Paz que se realicen para el fin del conflicto político armado.
• Al gobierno de México, que declare la Alerta de Violencia de Género para el estado de Chiapas.
• Al gobierno de Chile, el cese de la violencia contra la mujer, jóvenes, niñas y niños del pueblo Mapuche Lafkenche.
• Al gobierno de Bolivia, el pedido de destitución del Sr. Sacha Llorenti, como Embajador de DD.HH. por Bolivia ante las Naciones Unidas, por ser uno de los responsables de la brutal represión a la VIII Marcha Nacional en defensa de la tierra, territorio, la vida y la dignidad, represión perpetrada en Chaparina el 25 de septiembre de 2011, invocando que el gobierno, esclarezca, haga justicia, repare y sancione la violación de los derechos de los pueblos indígenas y originarios de Bolivia.
• A los gobiernos del Continente, exigimos garantías para las mingas, movilizaciones y acciones de exigibilidad de derechos de los pueblos indígenas y de las mujeres en el continente del ABYA YALA. Rechazamos la criminalización a la protesta social que se está realizando en los diversos países.

A la V Cumbre Continental de los Pueblos Indígenas solicitamos la adopción en su integralidad del mandato de la II Cumbre Continental de Mujeres y que apoye la realización de una movilización continental del Abya Yala contra las industrias extractivas.

Con la certeza de que el encuentro de hermanas del Abya Yala es una oportunidad única para la construcción colectiva de nuestro planes y hacia el reconocimiento pleno de nuestra ciudadanía como mujeres indígenas, decidimos que este espacio de la Cumbre Continental debemos fortalecerlo y para ello, proponemos nuestro próximo encuentro en tres años con el objeto de dar seguimiento a los acuerdos y procesos que en torno a esta cumbre se realizan en nuestros territorios.

La María Piendamó, 12 de Noviembre de 2013.

Por, la II Cumbre Continental de Mujeres Indigenas, la Mesa de Conducción.



Más información:
www.movimientos.org/enlacei y http://www.cumbrecontinentalindigena.com/

Mandato del Tercer Encuentro Continental de Jóvenes Indígenas




Reunidos en el resguardo indígena La María, Piendamó, departamento del Cauca, Colombia, durante los días 11 y 12 de Noviembre del 2013 jóvenes de los siguientes países: Colombia, Ecuador, Bolivia, Guatemala, México, Estados Unidos y Canadá, con el fin de analizar, discutir y propone ante la actual situación política, Social, Económica, cultural y organizativa que vivimos las y los jóvenes indígenas del Abya Yala, mismos que atentan contra la pervivencia de nuestros pueblos y de la madre tierra.

Las y los jóvenes presentes en este III Encuentro Continental de la Juventud en el marco de la V Cumbre Continental, aclaramos que nuestros procesos son una ventana para seguir haciendo la articulación y la unidad al interior de nuestras comunidades indígenas, que es prioritario y urgente, que nosotros como jóvenes, integrantes de nuestros pueblos seamos actores estratégicos para el cambio en los espacios que se generen alrededor del movimiento indígena, aportando en la construcción y tejido de los procesos de los mismos.

Que las y los jóvenes indígenas no hemos sido ajenos a las problemáticas que vivimos en nuestros pueblos, a la necesidad de seguir trabajando de manera colectiva con nuestros mayores, ancianos, mujeres y niños, como mecanismo para seguir fortaleciendo nuestros principios de lucha, y seguir avanzando en la unidad como hermanos del ABYA AYALA.

Es por ello que en esta V CUMBRE DE LOS PUEBLOS INDIGENAS, ratificamos esa voz de unidad y el compromiso pleno de seguir avanzando en el fortalecimiento de nuestros procesos, articulados desde nuestras autoridades y organizaciones, avanzando en tejer la autonomía y la identidad que nos caracteriza como pueblos originarios del ABYA AYALA.

“Nosotros somos como estas semillas de la historia que contamos. Fueron puestas en arcilla para preservarlas. Las semillas eran durmientes y escondidas, para protegerlas, pero nunca fueron completamente destruidas, solo durmiendo y esperando su tiempo para despertar y florecer de nuevo. Y antes de que estas semillas fueran puestas en la arcilla, las semillas venían desde plantas fuertes y florecientes, con una historia milenaria y un ciclo de vida. Similarmente, venimos de culturas florecientes, con sus historias y saberes, que cuando fueron atacados e invadidos hace 500 años, se pusieron como durmientes para protegerse. Pero aunque esteban ocultas, siempre se profetizó que iban a volver para ayudar a sus pueblos a florecer de nuevo. Como juventud de la profetizada Séptima generación, somos las semillas preservadas y protegidas, y nos toca avanzar en este tiempo para ayudar a nuestros pueblos a florecer”

En ese sentido y analizando la situación que se vive al interior de cada país presente, articulado a sus organizaciones locales; los y las jóvenes presentes en esta V CUMBRE DE LOS PUEBLOS INDIGENAS, reflexionamos frente a la difícil situación que vivimos en nuestros pueblos y donde identificamos las siguientes problemáticas:

⦁ Debilitamiento de las Economías Propias: producto de la embestida capitalista, el fortalecimiento de monopolios de las grandes empresas, que se expresa en la destrucción de las economías populares y comunitarias, falta de producción de alimentos y semillas propias, que agudiza la migración, promovido por la ausencia de inclusión en el sistema productivo. Proponemos generar iniciativas económicas desde la realidad de las y los jóvenes.

⦁ Nuestros Territorios fuentes de Vida, están siendo saqueados e invadidos por las empresas extractivas nacionales y transnacionales, por esto declaramos el No rotundo a estas; por esta razon los y las jóvenes indígenas del Abya Yala, nos comprometemos a consolidar la Autonomía plena de los territorios, implementando la Guardia Indígena Comunitaria, en ejercicio de reconstruir el Poder Popular.

⦁ Identidad cultural: la sociedad excluyente impuesta desde el poder político económico dominante, que intenta borrar nuestra memoria histórica, negando y ocultando las formas de vida de nuestros pueblos. Por esto los y las jóvenes indígenas del Abya Yala, proponemos y nos comprometemos a sostener el fortalecimiento de las prácticas de los saberes ancestrales, a través del empoderamiento de los espacios sagrados y ceremoniales, en todas las actividades propias de nuestras organizaciones.

⦁ La educación colonizadora dominante, que intenta imponer su tesis, deslegitimando los conocimientos propios y ancestrales, generando un proceso de alienación y aculturación en nuestras comunidades. Los y las jóvenes indígenas del Abya Yala, planteamos la consolidación de una real educación intercultural, propia, publica, popular y comunitaria, que respete las prácticas y principios ancestrales, planteada desde las realidades de cada uno de los territorios.

Realizando un análisis de la situación que se vive en los distintos países del continente y con el propósito de tejer un camino que nos lleve a superar las problemáticas que vivimos, concluimos lo siguiente:

1. Nuestro compromiso con el fortalecimiento de los procesos juveniles indígenas, considerando que esto aporta al fortalecimiento de nuestros pueblos y organizaciones.

2. Creación de escuelas de formación socio política y organizativa, para jóvenes en cada país del Abya Yala, con el objetivo de fortalecer las organizaciones indígenas.

3. Crear un equipo de comunicación virtual, que difunda la información del proceso juvenil e indígena, garantizando una mejor articulación y comunicación, que aporte a la organización de la I cumbre de jóvenes del Abya Yala. Estará conformado, por dos delegados (varon-mujer) de cada país integrante, para la construcción de una página web y blog, con herramientas de las redes sociales, que difunda el trabajo de todos los países y al mismo tiempo se trabajará en coordinación con los comunicadores indígenas del Abya Yala.

4. Creación del Consejo de Coordinación de jóvenes del Abya Yala, liderado por la dirigencia de la CAOI y por las organizaciones asistentes al tercer encuentro continental de jóvenes indígenas.

5. Respaldamos el proceso de paz que desarrolla el pueblo colombiano y exigimos que dentro de este sea tomado en cuenta las demandas históricas de los pueblos indígenas, que se concretan con un espacio en las negociaciones que se están llevando a cabo en Cuba, para el respeto a su territorio, a sus saberes tradicionales, formas de convivencia, ya que sin esto no podrá existir una paz verdadera.

6. Proponemos la realización de una marcha continental por la vida y el territorio, que nos permita recorrer los caminos de luchas conjuntas, estrategias coordinadas hacia la autodeterminación plena de los territorios. Esta marcha continental por la vida y el territorio ira avanzando en su proceso de consolidación.

7. En este contexto, el III encuentro de jóvenes del Abya Yala solicita a esta V Cumbre que declare la realización de la I cumbre continental de jóvenes del Abya Yala, a desarrollarse en el marco de la VI cumbre de los pueblos del Abya Yala.

Es dado y firmado por el Consejo de Coordinación de Jóvenes del Abya Yala, en el territorio de dialogo y paz, Resguardo la María Piendamó, Cauca-Colombia, a los 12 días del mes de noviembre de 2013.

http://www.cumbrecontinentalindigena.com/mandato-del-tercer-encuentro-continental-de-jovenes-indigenas/





La Vía Campesina en las instituciones de seguridad alimentaria de la ONU


Garantizando los derechos de los campesinos
15-11-2013



“Las reformas en las instituciones internacionales como el Comité de Seguridad Alimentaria Mundial (CSA) deben aprovecharse para hacer avanzar la causa de los campesinos y pequeños agricultores. Lo cierto es que ninguna política, ya sea a nivel nacional o internacional tiene realmente en cuenta los intereses de este colectivo, así que somos nosotros los que tenemos que decir lo que necesitamos” - Ibrahim Coulibaly, presidente de la Confederación Nacional de Organizaciones Campesinas (CNOP por sus siglas en francés) de Malí.
Hay una cierta emoción en La Via Campesina acerca de las evoluciones recientes en la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO). El 4 de octubre de 2013, el Director General de la FAO, Jose Graziano da Silva, formalizó la relación entre ambas organizaciones a través de un acuerdo de colaboración, reconociendo a La Via Campesina como la más importante representante de los pequeños productores de alimentos de todo el mundo.
Este es un paso más del que alegrarse de una serie de reformas en curso en la FAO, que han creado un espacio único y sin precedentes para colaborar con la sociedad civil y democratizar el escenario de las políticas alimentarias mundiales. La Via Campesina se ha involucrado diligentemente en estas reformas para promover la soberanía alimentaria.
Estas reformas tienen por fin darle a la FAO no solo una mayor legitimidad política, haciéndola más inclusiva, sino también devolverla a su calidad de piedra angular de la cooperación internacional en el área de la seguridad alimentaria, empezando a tomar de las manos del Banco Mundial (BM) o la Organización Mundial del Comercio (OMC) este tipo de decisiones acerca de políticas. Si bien esta evolución es bienvenida, el movimiento campesino mundial no deja de ser realista en cuanto a la cantidad de esfuerzo que debería dedicar a la ONU, manteniendo al mismo tiempo su punto fuerte sobre el terreno, movilizando agricultores y construyendo alternativas.
Una institución importante que también fue reformado dentro del proceso de reforma de la FAO es el Comité de Seguridad Alimentaria Mundial (CSA). Es un órgano intergubernamental aparte, y a día de hoy constituye el espacio clave para la alimentación y la agricultura en el sistema de la ONU. Sus decisiones las pone en práctica la FAO, así como otras instituciones de la ONU relacionadas con la alimentación, tales como el Fondo Internacional para el Desarrollo Agrícola (FIDA), el Programa Mundial de Alimentos (PMA) y el Grupo Consultivo sobre Investigaciones Agrícolas Internacionales (CGIAR por sus siglas en inglés).
Fundado inicialmente en 1974, con el tiempo este espacio se vio descuidado y perdió cualquier impacto sobre la gobernanza agrícola mundial, que a los estados les parece más adecuado dejar en manos de otras instituciones como el BM o la OMC. La sociedad civil y los agricultores siempre se opusieron a este control de las políticas alimentarias por parte de organizaciones financieras y comerciales que, a sus ojos, no tendrían cualquier legitimidad para hablar del hambre.
En primer lugar, porque representan los intereses del agronegocio y el comercio en vez de los de los pequeños agricultores o los malnutridos. De hecho, la crisis alimentaria mundial de 2008, que hizo pasar hambre a millones, fue principalmente resultado del acaparamiento y la especulación características de un sistema alimentario de mercado libre controlado por el agronegocio. Fue una crisis de precios, más que el resultado de una falta real de alimentos. La crisis colocó el tema de los alimentos y la agricultura en un lugar preeminente en las preocupaciones políticas internacionales, dando otro empujón importante a la reforma del CSA. En segundo lugar, estas instituciones son antidemocráticas. Están controladas por los países ricos de la OCDE, tales como Estados Unidos, el Reino Unido y Australia, entre otros. La sociedad civil no tiene voz aquí. Estás razones hacían tanto más importante quitarles el control de las cuestiones alimentarias y darlo a un espacio en el que la gente y los gobiernos pudiesen de facto colaborar para acabar con el hambre, en lugar de sacar provecho de ella.
Las intensas negociaciones en 2009, con una fuerte presión por parte de la sociedad civil y el apoyo de algunos gobiernos progresistas consiguieron al fin una reorganización del CSA para convertirlo en el espacio intergubernamental clave en el sistema de Naciones Unidas que goza de reconocimiento. En esta nueva estructura del CSA, la sociedad civil tiene ahora un papel reconocido oficialmente que le permite participar en pie de igualdad con los gobiernos en reuniones y negociaciones gubernamentales. Pese a que no se le permite votar, tiene la posibilidad de ejercer su influencia en debates y recordar a los gobiernos sus compromisos. Para obtener el mejor asesoramiento técnico, el CSA ha establecido asimismo un Panel de Expertos de Alto Nivel (HLPE por sus siglas en inglés). Un órgano constituido no solo por expertos y académicos, sino también por personas con conocimiento empírico, tales como los propios agricultores, que redactarían informes acerca de diferentes asuntos para dar información de fondo y análisis. El CSA reconoce la autonomía de la sociedad civil, que puede escoger a sus propios representantes y su propio mecanismo para organizar su participación. Se organiza bajo el paraguas del Mecanismo de la Sociedad Civil (CSM por sus siglas en inglées), que tiene 41 miembros de diferentes circunscripciones en el comité de coordinación, incluyendo 4 para los grupos de agricultores.
La importancia del CSA está creciendo. Se ha dado una participación diligente por parte de los gobiernos en las sesiones recientes y la presencia de ONG y del sector privado ha aumentado igualmente. Pero el camino hasta allí no ha sido todo rosas para los movimientos sociales. Es importante recalcar que entre los actores reconocidos por el CSA se cuentan también fundaciones privadas, corporaciones, grandes ONG, el BM y la OMC, lo cual hace que sea todavía más importante para los pequeños agricultores el ocupar este espacio y promover políticas progresistas para la soberanía alimentaria. El año pasado, en la 39 sesión del CSA, el G20 también se acercó a este órgano para hacerle adoptar su posición en cuanto a la volatilidad de los precios. Que se sepa que la delegación de la sociedad civil abandonó la sesión plenaria cuando un CSA claudicante adoptó esta posición sobre la volatilidad de los precios. La posición del G20 contrastaba con las peticiones de la sociedad civil de una regulación estricta de los mercados de futuros, a los que se veía como contribuyentes a la volatilidad de precios y la inseguridad alimentaria en los países más pobres.
También ha habido algunas victorias parciales. En mayo de 2012, el CSA adoptó las Directrices Voluntarias sobre la Gobernanza Responsable de Posesión de Tierras, Pesquerías y Bosques, lo cual demostró que el CSA es capaz de llevar a término con éxito una consulta entre estados a través de un proceso abierto también a la sociedad civil. La Via Campesina lamenta que el documento tenga algunas carencias, por ejemplo, su carácter no vinculante y el hecho de que no se pueda sancionar a ningún estado. Las grandes adquisiciones de tierras quedan más reguladas que prohibidas. Aun así, este texto da algún poder a la gente para oponerse a la tendencia de acaparamiento de recursos, sobre la premisa fundamental de los derechos humanos. Se trata de un texto progresista que incluye principios como el consentimiento previo informado, el recurso a la justicia, la transparencia, el respeto de la dignidad humana, la igualdad de género, el reconocimiento de los derechos consuetudinarios, sistemas de tenencia para el uso comunal de la tierra, así como derechos legítimos de ocupación que todavía no gozan de protección jurídica. Acaba con el monopolio del Banco Mundial en la definición de políticas relacionadas con el suelo, lo cual es un logro significativo. Este fue un momento histórico, puesto que el CSA rechazó los Principios para la Inversión Agrícola Responsable (PRAI por sus siglas en inglés) del Banco Mundial, que éste había intentado proponer como base para las políticas sobre el suelo. Este es un marco político en el que ni el BM ni la OMC han conseguido imponer su visión.
Actualmente, el CSA se reúne en su cuadragésima sesión en Roma del 7 al 11 de octubre, para debatir asuntos clave como la inversión agrícola. LVC está presente y pone en tela de juicio lo que de positivo se dice acerca de las inversiones a gran escala, que más bien sirven para legitimar el acaparamiento de tierras y que expulsan a los agricultores de sus tierras para promover proyectos orientados a la exportación como los de agrocomestibles. Este tipo de tendencia hace aumentar el hambre y la inseguridad alimentaria. La Via Campesina defiende que las políticas destinadas a reforzar la producción alimentaria deberían apoyar inversiones por parte de los propios pequeños productores de alimentos. En palabras de Elizabeth Mpofu, coordinadora general de LVC: “ las inversiones agrícolas de los pequeños agricultores deberían ser reconocidas como la contribución más importante en la producción alimentaria para erradicar el hambre.”
Pese a que estas reformas para la inclusión de la sociedad civil son bienvenidas, ha habido muchos debates en el movimiento acerca de la cantidad de energía que debería destinarse a estas políticas institucionales, en relación con una acción concentrada en movilizaciones, posicionamiento de confrontación y construcción de alternativas. La Via Campesina se ha involucrado desde el principio en este proceso, tanto desde dentro de las propias negociaciones, como desde fuera, llevando a cabo acciones, y manteniendo su genuino carácter de movimiento social. El movimiento considera importante ocupar estos espacios, llevando el poder de los ciudadanos al reino de la política institucional e interactuando con gobiernos de forma más pragmática para promover sus objetivos. Pese a todo, es también consciente de las limitaciones de la política, teniendo en cuenta el impacto limitado que se puede obtener, y los recursos ingentes que son necesarios para formar parte de este tipo de espacio, tanto desde el punto de vista humano y técnico como financiero, cargas difíciles de soportar para un movimiento social. Tampoco los miembros de La Via Campesina están acostumbrados a este tipo de escenario tecnocrático. Pese a reconocer su importancia, recalcan la necesidad de conseguir un equilibrio entre este trabajo y sus compromisos en sus países de origen. Angel Strappazon, líder argentino de La Via Campesina, explica que “ estar ahí supone un sacrificio para nuestras comunidades y organizaciones... es un sacrificio, pero también una responsabilidad. Una tarea difícil pero feliz, ya que esperamos que, gracias a nuestra energía y nuestra dedicación conseguiremos hacer cambiar de opinión a los gobiernos y a la gente”.
Así pues, mientras que el CSA representa una oportunidad para la sociedad civil, La Via Campesina cree que tendrá que tomar decisiones más concretas para ganar credibilidad política a ojos de los movimientos sociales. Mientras el trabajo institucional continua, las movilizaciones de campesinos en defensa de sus derechos y la construcción de alternativas en ese ámbito siguen siendo la principal estrategia del movimiento campesino internacional.
Más información:
La FAO cooperará con La Via Campesina, el mayor movimiento de productores alimentarios a pequeña escala: http://www.fao.org/news/story/en/item/201824/icode/
Boletín Nyéleni 15, especial agroinversiones : http://www.nyeleni.org/?lang=es&lang_fixe=ok
Página web del MSC : http://www.csm4cfs.org/Default.asp?l=esp&